Cuando se requiere realizar una ponencia, se deben considerar dos elementos fundamentales, el primero es la información a impartir por el presentador, la cual tiene que ser clara y concisa; el segundo, pero no menos importante, es el material audiovisual, cuya producción debe impactar a los espectadores; por lo tanto, se debe tener en cuenta el alquiler de proyectores que garantice el éxito esperado por todos los participantes.

Uno de los factores más importantes en los materiales audiovisuales son las imágenes y los colores que las conforman, por lo que es imprescindible que el proyector a emplear sea de máxima calidad y tecnología, que permita la difusión ideal del contenido deseado, para captar la atención e interés de todos.

Existen diferentes tipos de proyecciones: tercera dimensión (3D), producción de vídeos y escenarios, mapeado normal y mapping, y además una amplia gama de proyectores, siendo los más comunes: procesamiento digital de luz (DLP), pantalla de cristal líquido (LCD), picoproyector y proyector 3D. La elección de alguno de estos dependerá tanto del contenido a transmitir como del público a quien va dirigida la información.

Los proyectores han alcanzo un significativo auge en tiempos actuales, principalmente por su desarrollo tecnológico en cuanto a la calidad de producción de las imágenes. Una muestra clave de lo antes expuesto es en el séptimo arte, el cine, en dónde la imagen se ha perfeccionado hasta el punto en que el espectador puede sentir que está inmerso en las escenas que observa, debido a la alta definición de los colores y efectos.

Actualmente, el uso de proyectores engloba a todos los sectores sociales, ya que se utilizan en colegios, universidades, conferencias, reuniones de trabajo, iglesias, festejos, conciertos y cines; en fin, en cualquier evento donde se requiera proyectar imágenes a grandes dimensiones a un grupo de espectadores.